martes, 8 de marzo de 2011

Libros

En mi familia no se llevaba lo de leer... mi padre en sus tiempos leía novelas del oeste, y mi madre bueno siempre estaba tan ocupada con 4 hijos, la casa, las abuelas...
A los 9 años me operaron de una rodilla y me regalaron 4 o 5 cuentos... pero no volví casi a leer hasta los 14... no había libros que leer, si acaso los que le pedían en clase a mi hermano mayor. Que me los releía una y otra vez.
Con los 14 me empezaron a pedir libros a mí en clase, y con los 14 vino mi primera beca, era dueña de un poco de dinerillo para mí y me lo gasté en lo que quería, en libros. Nunca he sido guapa, ni coqueta así que ni ropa, ni maquillaje ni nada por el estilo.
Desde ahí fue no parar, me encantaba sumergirme en otros mundos, imaginar otras épocas de la mano de las novelas, sentir otras sensaciones. Abría los libros, cerraba los ojos y metía mi nariz entre las páginas... y el libro olía a lo que trataba el libro!!! La casa de los Espíritus olía a casa vieja! Escuadra hacia la muerte olía a pólvora y a sudor.
He llegado a leerme Mansfield Park en 24h, leches que dolor de cabeza acabé teniendo. Para mí un libro ha sido más que un amigo en mi vida, han sido compañeros de mis horas más bajas y de mis horas más alegres tambien.

2 comentarios:

  1. ¡¡jajaja!! Un secreto: He sido incapaz de pasar de la quinta página de "El Señor de los Anillos".

    ¡¡Me pareció infumable!!!

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    1. Cada uno tiene su titan invencible... Confieso que he empezado varias veces Guerra y Paz y no he conseguido terminarlo :$

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