martes, 29 de marzo de 2011

Clavado en el corazón.

¿Hablas de ser amigos? No lo entiendes, ¿no comprendes que es imposible para mi?
Que para mi no existe la vida ya, que cada día por venir me asemeja una tortura, después de haber probado tus besos, de haber sentido tus manos en mis caderas, de haberme sentido envuelta por tu cálido abrazo. Como puedo seguir adelante después de ti? Pensar en caminar sin ir de tu mano.



¿Hablas de ser amigos? ¿Como puede ser que no añores lo que vivimos? ¿Tan poca importancia tuvo para ti? Que no quieres recuperar como yo ansío, las noches abrazados, cada vez que me mirabas a los ojos y me decias cariño, y yo simulando sorpresa contestaba; dime, y tu contestabas… te amo. Yo sabía que ibas a decirlo, y aun así cuando tus labios pronunciaban la palabra el corazón me estallaba en el pecho de alegría. ¿Hablas de ser amigos? Cuando tu ya has rehecho tu vida, y yo aun siento tu calor en mi cama. Cuando regalas tus besos de nuevo a una mujer que no soy yo. Cuando alguien que no soy yo, es feliz como yo pude haber sido.

No concibo ser tu amiga, no puedo estar a tu lado y apagar mi corazón, reñirle por que salte desbocado en tu presencia. Ahogarlo por que me despierte sobresaltado en la noche. Por que te añora, por que te sueña, por que aun te amo, demasiado.

1 comentario:

  1. El afecto es oro en cualquiera de sus vertientes. A veces, una gran amistad es la mejor alternativa a un amor imposible. De algún modo se sigue teniendo cerca al ser amado. Y saber de su felicidad, debe servir para sentirnos nosotros más felices. Que alguien no te quiera como tú desearías, no significa que no te quiera. Valora éso, no hay mejores amigos que aquellos que alguna vez te han amado.

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